Federico Arnau. Comerciante jubilado.
Mañana domingo estamos convocados a elegir quien nos gobierne durante los próximos cuatro años y, con mi modesta opinión, no siendo especialista en cuanto a política de Estado, como ciudadano normal y corriente de los que los políticos piensan que estamos idiotas, sí que me paro a pensar quien me puede ofrecer más confianza sin llegar, desde luego, al 100 %, ya que nadie merece mi total admiración ni me fio de su labor. Pero si hago balance de los cuatro últimos años, puedo pararme a pensar qué empresa de gestión (partidos políticos) me pueda fastidiar menos y pueda plantar cara a los acontecimientos que se avecinan.
Siempre me he guiado más por las personas que por los partidos. No milito ni pertenezco a ningún partido y desde luego no tengo que agradecer a ninguno nada, porque no me han regalado nada, al contrario, me han jodido unos más que otros, como seguramente a la mayoría de españoles.
Lo importante de estas empresas de gestión, primero sería ser decentes en sí mismos, y para eso, pensar con el ciudadano y con el Estado Español.
Candidatos a gobernar
Mariano Rajoy, agredido por un menor de edad antisistema de los que por desgracia hay demasiados, que han tenido de todo y no han trabajado y dado un palo al agua, sea menor o llegue hasta los 25, da lo mismo.
A Rajoy le molestó que Pedro Sánchez le llamase indecente, y ciertamente, el secretario del Partido Socialista Obrero Español fue maleducado, impresentable y vergonzoso. Ahora bien, cuando uno lleva una carga como el PP, siendo él su máxima autoridad, hubiese tenido que coger los toros, porque son toros, por los cuernos y uno a uno darle un estoque. Él puede ser una persona íntegra, honrada y decente, pero tenía en Génova demasiadas ratas a las que no supieron eliminarlas a tiempo. Pero es que en la Generalidad Valenciana tenían ratas desde el Gobierno de Zaplana y, sobre todo, con el de Camps; y que no están en la cárcel por el odio del PSOE, que pidió que fuese el Jurado Popular, en lugar de ser juzgados por personas profesionales en temas jurídicos.
Aun así, el que haya habido tanto sinvergüenza, igual como en el partido de la oposición o en Convergencia, da lo mismo, el ciudadano le dio al PP la victoria, aunque no la mayoría, cosa que aprovecharon los demás para pactar y bajarse los pantalones aunque fuese con el diablo, para poder estar en el sillón de mando, con lo cual es un desprecio al ciudadano por falta de respeto y no acatar lo que los votos dicen. Después de la etapa Zapatero nadie puede poner en duda que España ha ganado en estabilidad, reconocimiento, y así lo demuestran los mercados con la prima de riesgo 500 puntos por debajo; el crecimiento y el ambiente que se ve en el ciudadano en las zonas comerciales, aunque falta muchísimo para llegar a una estabilidad y servicios de cinco estrellas; pero nadie lo puede poner en duda, por lo tanto, según lo que salga mañana domingo podemos consolidar o hacer un imprevisto.
Pedro Sánchez se lo ha creído demasiado. Le falta muchísimo recorrido y lo demostró antes, durante y después del famoso debate; chabacano, insultante para el espectador, candidato que no merece ser secretario General del PSOE. Pues aunque el PSOE no tiene demasiada gente, salvo las viejas guardias, Chacón hubiese sido más rentable. Y lo malo de esto es que lo sufrimos en la Generalidad y en el Ayuntamiento de Castellón. Yo recomendaría que Sánchez fuese a unas clases privada que le podría dar su compañero de partido y exministro José Luis Corcuera; alguien que no se si tiene el Bachiller puesto que era electricista, que procedía de UGT y tras un breve paso en la cúpula fue ministro, y sin embargo, ¡Qué gran estadista!, ¡que señorío! y ¡cuánto deberían de aprender muchos socialistas! y eso que fue un ministro conflictivo. Ustedes mismos decidirán si desean hacer experimentos o no.
Albert Rivera ha subido demasiado deprisa, no es que no pudiese ser presidente, pero es cierto que aún le falta. Estos cuatro años en el Congreso deberían de ser un master para, en las próximas elecciones, dar el salto al Gobierno, y mientras, poder estructurar sus equipos en las diferentes provincias y ciudades, sin que le dimitan afiliados y poder hacer equipos que se conozcan y que trabajen por los principios que Ciudadanos expone en su carta de presentación. Aun así pienso que Rivera debe de tener un momento de reflexión y se lo terminan de aconsejar desde el Reino Unido. Y eso no es meterse en medio de asuntos de Estado, sino dar un consejo debido a los que nos llevan ventaja en Democracia.
Pablo Iglesias no puede ser presidente de España. Puede ser un parlamentario más y que pueda lanzar los dardos desde la tribuna del Congreso. Su discurso, que ha cambiado, porque le ha fallado Grecia, en la que decía que empezaba el cambio, y su amigo ha tenido que bajarse los pantalones, y los calzoncillos, para que la Troica le dé bien; y su amigo y benefactor, el venezolano Maduro, el que le decía a Rajoy adiós, adiós… el adiós ha sido para él mismo. Y como dictador, por mucho que acepte los resultados se está sacando de la manga unos colectivos que no tenían opción a nada para intentar machacar a la Cámara en la que sus opositores se han hecho con las dos terceras partes.
Iglesias se dirige educadamente, con una retórica de buen profesor con muchas frases hechas y eslóganes, pero eso no es suficiente. Su partido, donde gobierna, ha hecho lo que tanto han criticado antes; y sus dirigentes utilizan los coches oficiales, tienen unos sueldos altos, visten inadecuadamente, lo que es una falta de respeto hacia el ciudadano, pues en las instituciones se tiene que tener un decoro; no han renunciado a los asesores y han colocado en puestos de confianza a sus familiares más cercanos… que sabemos que los puestos de confianza son solo para mientras estén el poder, pero ya convocaran unas oposiciones internas para que su puesto se convierta en una plaza legal. Por lo tanto, la confianza es bastante negativa.
Están el resto, la pedrea, pero que también tienen propuestas importantes para el ciudadano y que quien tenga la opción de alcanzar la responsabilidad no tendría que hacer ascos a estas propuestas, pues entre todos, tengan más escaños o menos escaños, si es importante para el Estado Español y sus ciudadanos se deberían tener en cuenta.
Nos jugamos mucho. Esta legislatura será muy movida con el independentismo de Cataluña y el País Vasco, que está a la espera de ver cómo se desarrolla el pulso al Estado Español por parte de Cataluña para empezar ellos otra vez como en la época de Ibarreche.
Rajoy y Rivera están en contra de la ruptura de España por mucho cambio de la Constitución. Lógicamente hay artículos que habrán quedado caducos, pero en los que se refiere a los que la unidad de España reside en el pueblo Español como otros que vayan en contra de la igualdad de los españoles, jamás deberán de ser modificados.
Iglesias está en contra de la ruptura, pero a favor de los referéndums sin explicar si hace esa consulta y le sale positiva qué decidiría; ¿dar la autodeterminación a Cataluña y luego al País Vasco y cualquier comunidad que forma España, en detrimento de los ciudadanos de esas comunidades que desean continuar junto al resto de españoles? Deberemos pensar también en esto, porque esto crea una inestabilidad de la que la economía se resiente y al final la pagamos los de siempre, los ciudadanos, ni las grandes empresas del Ibex ni las grandes fortunas.
Pedro Sánchez dice, que si es presidente lo primero que hará es llamar al presidente de la Generalidad… ¿para ofrecerle el qué? ¿Un estado federal con todas las competencias?, o sea, una nueva nación bajo la protección de España, como hace 600 años, que eran unos simples condados bajo la protección del Reino de Aragón. ¿Sería capaz Sánchez de vender a los ciudadanos catalanes que quieren seguir siendo españoles a los independentistas?, ¿cómo España, en un momento crucial del final del General Franco y el Rey de Marruecos aprovechó para hacer una marcha verde con todos sus ciudadanos, la mayoría de ellos bastante incultos en esa época, desafiando a las tropas españolas que tenía minados los terrenos de la frontera del Sahara, y que no se atrevieron a masacrar a todas esas personas a las que su rey mandaba como mártires sin armas en un desafío que, sin jefe de Estado y sin Rey, en ese vacío, se vendió al pueblo Saharaui , pueblo que tuvo que salir de su territorio y vivir en campamentos en territorio Argelino, y que incluso fue atacado por fuerzas de Marruecos?.
Ojala el pueblo español acierte y los líderes sean lo suficiente sensatos como para poder poner por delante de cualquier situación los interese de España y los españoles sin pensar en ideologías, colores, clases, y castas. Mucha suerte.
































