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La Unió de Llauradors i Ramaders alerta de una caída importante del precio en origen del porcino, como consecuencia de una sobreproducción en los diferentes países europeos productores, tras el veto ruso a las importaciones agrícolas y ganaderas de la Unión Europea.
La cotización de ayer en la lonja de referencia de Mercolleida fue de 1,155 euros el kilo de carne viva de porcino. La Unió denuncia que el precio está bajando cerca de 0,06 céntimos el kilo desde hace tres semanas y que este es el máximo que puede hacerlo según los estatutos de la Lonja. El ganadero de porcino, como consecuencia de ello, percibe un precio en origen que es el mismo prácticamente que el de coste.
La Unió pide tanto a la Conselleria de Agricultura como al Ministerio de Agricultura que intercedan para que la Comisión Europea active medidas de restitución a la exportación, además de promocionar el producto, permitidas por la Organización Común de Mercados (OCM), puesto que la nueva Política Agraria Común (PAC) prevé medidas excepcionales para evitar perturbaciones de mercado.
Las restricciones a las exportaciones de carne de porcino de la UE por parte de Rusia empezaron en abril del 2013, después de diferentes brotes de peste porcina africana y peste porcina común detectados en algunos países del este. El veto ruso a los productos agrarios del agosto pasado como reacción al embargo europeo en Rusia por el conflicto de Ucrania, agravó la situación, puesto que la prohibición se extendía a la carne fresca y a los subproductos de cerdo.
Además, hay que tener en cuenta que la Comunitat Valenciana y el resto del Estado también exportaban porcino a los otros países europeos que, a su vez, lo reexportaban a Rusia.
Las exportaciones de porcino de la Unión Europea a Rusia han caído un 10% durante los primeros siete meses del año, unas 165.000 toneladas. La prohibición rusa ha provocado que la UE deje de exportar 438.000 toneladas (366.000 tn a Rusia, 46.000 a Bielorrusia y 26.000 a Ucrania; tres mercados que supusieron el 31% de las exportaciones comunitarias de porcino en 2013. Este impedimento se ha compensado con un aumento de las exportaciones a otros países, unas 274.000 toneladas, fundamentalmente a Japón, Filipinas y Corea del Sur.