Miguel Bataller. Ciudadano del Mundo y Jubilado.
Esta es la palabra que encierra todos los secretos en el actual mapa político y sindical, para terminar consagrándose definitivamente en el judicial, para cerrar el círculo de la impunidad.
No voy a incurrir en el error de pensar que todos los políticos y sindicalistas son corruptos, pero sin la menor duda no son pocos los que se regodean y crecen en esa basura que les enriquece y degrada, ante la aparente ignorancia de quienes debían de perseguir la primera parte del enunciado:
1-El ‘SOBRE’.
Están comprobados los ‘sobres’ más o menos anónimos e ilegales, que reciben no pocos representantes de las instituciones del Estado (políticos y sindicalistas) ante la aparente ignorancia de quienes les rodean y no les denuncian, con lo que se convierten en cómplices del delito, por omisión.
2-El ‘SE’.
Tanto unos como otros ‘saben’ en base a que motivos reciben ese dinero en ‘sobres’, que van a parar a veces a sus propios bolsillos, y en otras a financiar los gastos desmesurados de las campañas electorales de sus partidos y sindicatos, y los gastos generales que no pueden ser atendidos en su totalidad con los fondos del sistema de financiación legal debidamente permitidos y justificados ante el Tribunal de Cuentas.
3-El ‘MIENTO’
Unos y otros han convertido la ‘MENTIRA’ junto a la supuesta ‘IGNORANCIA’ en las dos herramientas fundamentales de su defensa, en el momento en que son sorprendidos “con las manos en la masa”.
De ese juego de ‘SOBRES, SABER Y MENTIR’ se llega al final de proceso judicial.
Y mucho me temo que ante la dependencia de las mas altas instituciones del Poder Judicial al Poder Ejecutivo, los Gobiernos que les designan para los cargos que ejercen excelentemente retribuidos, la cuadratura de ese círculo se va a cerrar con la palabra clave que encabeza esta columna:
Un SOBRESEIMIENTO, originado por los tres componentes de la misma:
‘SOBRE…..SE…..Y…..MIENTO’.
Y así seguiremos tratando de denunciarles, y ellos seguirán burlándose de nosotros en nuestras propias narices, apoyados por esa impunidad que nunca me cansaré de denunciar.
Nada me daría mas satisfacción, que al salir las sentencias de todos los casos en los que hay imputados políticos y sindicalistas, se encontraran a los responsables, y se les condenara y castigara ejemplarmente.
Pero me temo, que al igual que ocurrió en el Caso del 11M, y en el Faisán, nos vamos a quedar con las ganas de conocer a los culpables y responsables de tanta iniquidad.
Si no se quiso averiguar quienes asesinaron impunemente a 200 españoles, y mal hirieron a casi dos mil, y se ha querido proteger a quienes traicionaron a las Fuerzas de Seguridad del Estado, y permitieron escapar a los asesinos y terroristas a los que avisaron para evitar sus detenciones, mucho menos les va a importar que unos corruptos, inmorales y ladrones, acaben durmiendo en sus propias camas cada noche, en vez de pasar unos cuantos años ‘a la sombra’, tras devolver todo lo robado o defraudado.






























