Uno de los edificios de la zona y otro bloque cercano están ‘okupados’ desde hace poco más de un mes
La asociación de vecinos muestra su hartazgo ante la “ineficacia” policial y reclama la presencia de los agentes como método disuasorio, “pues está llegando gente de fuera para comprar droga”. Relatan que existe un “continuo trapicheo en una de la plazas y hasta en las escaleras de uno de los bloques de viviendas”, lo que pone en peligro la convivencia y la salud del barrio.
La tranquilidad, el civismo y la convivencia se están viendo deteriorados estas últimas semanas en uno de los barrios de la ciudad de Castelló. Y es que hace poco más de un mes, un edificio (situado entre la calle Maestro Bretón y la avenida Almazora) fue 'okupado' por cuatro familias, como también otro de los bloques de la misma zona.
Así lo ha explicado a este diario la asociación vecinal del barrio conocido como 'Colorines', cercano al instituto Porcar, desde la que denuncian el continuo trapicheo de drogas por parte de algunos de estos 'okupas' en una de las plazas. Unas acciones que "están favoreciendo que venga gente de fuera del barrio a comprar y a consumir", tal y como relatan, "causando molestias y poniendo en peligro la convivencia y la salud del barrio".
"No estamos en contra de las familias que viven 'okupadas', pues creemos que todo el mundo tiene derecho a una vivienda, sino de las actividades ilegales que realizan algunas de esas personas", subrayan. Y es que además de en las plazas, en uno de los bloques es usual que los vecinos se 'topen' con escenas de consumo explícito en las escaleras de su finca. Unos episodios que han denunciado en varias ocasiones a la Policía Local pero que, aun así, se continúan repitiendo.
Es por ello que desde la asociación reclaman más seguridad, vigilancia y presencia policial en la zona para "poder disuadir este tipo de acciones". El ruido por las noches y la suciedad en las calles son otros de los problemas a los que se enfrentan los vecinos de manera diaria.
"Somos un barrio tranquilo, de gente trabajadora que se levanta a las 5.00 de la mañana para ir a trabajar y con una convivencia pacífica hasta ahora", lamentan. En este sentido, explican que el barrio "está muy viejo y deslucido", por lo que "hace unos meses comenzamos a realizar diferentes acciones y actividades para mejorar la imagen del mismo y dinamizarlo. Y la situación que estamos viviendo no ayuda a llevar a cabo este proyecto".
Con todo, los vecinos exigen inmediatez para dar solución a este problema con una mayor presencia policial, pues "nosotros no podemos enfrentarnos a ellos". Desde la asociación vecinal adelantan que están estudiando la recogida de firmas ante la ineficacia policial para aportar notoriedad al tema con el fin de lograr devolver la buena convivencia y tranquilidad que caracterizaba al barrio.
