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sábado, 27 de abril de 2024 | Última actualización: 02:05

3.500 usuarios de teleasitencia buscan una solución para no perder el servicio

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No todos los usuarios de este servicio son ancianos. También hay un porcentage de personas dependientes para las que la teleasistencia es su garantía de seguridad diaria cuando se quedan solas y temen sufrir una caida o padecer una crisis.Unas 3.500 personas de la provincia de Castellón se quedarán sin servicio de teleasistencia a partir del próximo 1 de enero, porque a la administración no le salen las cuentas.

La mayoría son personas mayores, que viven solas y cuyo único contacto con el exterior es la voz amiga del “medallón de la teleasistencia” o los voluntarios que pasan a comprobar que todo funcione, pero también hay casi un 10% de usuarios que son simplemente enfermos con parkinson, esclerosis múltiple o alguna discapacidad que les hace necesitar de este sistema de prevención para garantizar su seguridad diaria.

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José Manuel y su mujer, Ana, junto al terminal de teleasistencia que garantiza la seguridad de este usuario.

José Manuel es uno de estos usuarios. Vive en Costur, está casado y tiene tres hijos, pero con 38 años le diagnosticaron Parkinson y Ana, su mujer, necesita irse a trabajar cada día “sabiendo que si le pasa algo o tiene una crisis y es incapaz de marcar un teléfono solo con apretar un botón recibirá ayuda”.

Como él, son miles las personas para las que el fin de este servicio supondría un verdadero problema y es que la Federación de Municipios y Provincias que cofinanciaba el 65% del coste de la teleasistencia, ya no lo hará más y respecto el 35% restante del que se hacía cargo la Diputación Provincial, aún falta saber cuáles serán las medidas que tomará.

En el caso de Jose Manuel, él y su familia tienen claro que “sea como sea” necesitan estar conectados y saber que en cuanto hay una llamada “esta llega a la central de Cruz Roja, inmediatamente aparece en pantalla quien en el usuario, cual es su perfil, sus datos, etc y sin perder en ningún momento el contacto con él, en paralelo se activan los recursos que hagan falta, bien sea asistencia médica, CICU, ambulancia y también simultáneamente se llama a los familiares”, explica la responsable de este programa, en Cruz Roja, Arancha Monsonís.

Sin embargo, aunque para este vecino de Costur, de momento, es factible asumir el coste del servicio, si finalmente las administraciones no aportan solución, no todos los usuarios se lo pueden permitir. “Tenemos personas que apenas sobreviven con su pensión porque están ayudando a los hijos y manteniendo a duras penas dos familias, así que aunque desde Cruz Roja se ha hecho un esfuerzo muy importante y se bajado el precio del servicio de 29 a 19,75 euros al mes y hemos eliminado la fianza de 120 euros, pero, aún así, sabemos que no todo el mundo va a poder asumirlo”, señala Monsonís.

La lotería de necesitar teleasistencia en una localidad o en otra

El problema es tan serio que algunos ayuntamientos de la provincia se están planteando ser ellos quienes asuman este coste de sus propias arcas municipales. No obstante, no deja de ser dantesco que, al final, vaya a ser la lotería del municipio donde alguien esté empadronado, la que determine si una persona va a tener derecho a un servicio, vital en muchos casos.

Sea como sea, y según las conversaciones mantenidas hasta el momento ente Cruz Roja y distintos consistorios, poblaciones como Vila-real, con 171 usuarios, Onda, con 200, o Moncofa, Almenara o Morella parecen estar dispuestas a financiar este servicio, aunque, “de momento, -insisten desde Cruz Roja- aún no hay nada firmado”.

Ahora, todavía queda esperar cual es la propuesta que la Diputación Provincial pondrá sobre la mesa este viernes en la reunión prevista para tratar el tema, no obstante cabe recordar que, de sustituirse el actual servicio por otro de teleayuda, o similar, habría que reestrucuturar o sustituir todos los terminales distribuidos por la provincia con el coste económico adicional que esto supondría y decidir cuáles serían en ese caso las pautas de actuación o los dispositivos factibles de activarse en cada llamada.

Rosanna Blasco