Ginés Gascón Ramón. Médico internista
El pasado año la pandemia impidió a Castellón organizar el Campeonato de España de Ciclismo para Médicos. Afortunadamente este año, con un porcentaje importante de la población vacunada, podremos hacerla con más tranquilidad.
La prueba consistirá en un recorrido de 70 kilómetros, con salida y meta en Castellón, en cuyo itinerario se prevé el paso por la localidad de Benicàssim, y el ascenso en dos ocasiones al Desert de les Palmes.
Aunque se trate de un Campeonato de España para médicos, no hemos de olvidar que no somos, ni mucho menos, profesionales de la bicicleta. Es decir, tendremos que ir a nuestro ritmo. No debemos considerar estas pruebas como competitivas. No obstante, al final, todos tratamos de hacerlo un poco mejor, lo cual puede ser contraproducente, pues para mantener una buena salud, unos ejercicios de menor intensidad son suficientes. Las personas que ya hemos alcanzado cierta edad hemos de ser cautos, especialmente si se es, o se ha sido, fumador, se ha tenido colesterol elevado o tensión alta, pues puede ocurrir que los esfuerzos excesivos ocasionen accidentes cardíacos. Con esto no solo nos referimos a los accidentes coronarios, sino que también vemos en deportistas de cierta intensidad un incremento preocupante de arritmias.
El ciclismo como deporte es una práctica muy extendida en España y contamos con excelentes figuras a las que ni hace falta mencionar. Para este tipo de ciclismo se utiliza la conocida bicicleta de carretera, pero en los últimos años muchos de nosotros nos hemos pasado a la bicicleta de montaña, por el temor al tráfico, y porque puede ser más divertido para realizar pequeñas acrobacias. Por último, cuando las fuerzas ya no acompañan tanto, y queremos seguir realizando salidas con los amigos, siempre podemos pasarnos a la bici eléctrica.
La bicicleta en carretera nos inspira cierto respeto. Sin embargo, cuando el ciclista es prudente y además elige recorridos relativamente seguros el riesgo disminuye y los largos trayectos tienen la ventaja de desarrollar la resistencia, permitiendo que el ciclista elija el ritmo adecuado a su edad y condiciones físicas.
Practicado de este modo, el ciclismo puede ser saludable y puede hacerlo cualquier persona que goce de buena salud. Además, el entrenamiento de largo recorrido permite alcanzar una forma física que te prepara para otras formas de ciclismo, como el de montaña. Este último tiene el inconveniente de que exige esfuerzos súbitos intensos para nuestro corazón y también para múltiples articulaciones. Pero con la bicicleta de montaña tenemos la ventaja de acceder a parajes a los que solo se podría llegar caminando, o con vehículos todoterreno.
Evidentemente, la paz solo se puede alcanzar en silencio, y perturbando el medio ambiente lo menos posible, sin dejar rastro de nuestro paso. Estos circuitos por senderos pueden tener varios atractivos como el encuentro con la naturaleza, la compañía con otros amigos, el placer de ejercitar nuestro cuerpo, y por qué no decirlo, también la
satisfacción de alcanzar la meta propuesta. En general cuando deseamos hacer una excursión en bicicleta tanto por montaña como por carretera ha de ser un placer y no un martirio. Es decir, hay que circular a un ritmo de esfuerzo que permita mantener una conversación, si el recorrido se presta. Si el ciclista necesita respirar continuamente para mantener el ritmo, probablemente está exigiéndose demasiado.
El ciclismo es un deporte conveniente para todas las edades, pues hay ritmos y trayectos para todos. Pero es frecuente que llevados por la competitividad los ciclistas aficionados se excedan en sus esfuerzos y que el corazón alcance ritmos excesivamente rápidos. Para evitar esto, todos llevamos pulsómetro, que va informando en cada
instante de los latidos por minuto de nuestro corazón. Cada uno debe saber cuál es su frecuencia cardíaca máxima (que puede alcanzar solo durante un corto periodo) y también debe saber en qué rango de frecuencia cardíaca debe entrenar normalmente. El pulsómetro es un instrumento interesante para todas aquellas personas que quieran
obtener un rendimiento óptimo de su entrenamiento.
En España se practica mucho el deporte del sillón. Con un aperitivito, e incluso a veces con un cigarrillo, los telespectadores participan con toda la ilusión en muy diferentes acontecimientos deportivos. Nosotros, sustrayendo algunas horas al televisor, y entrenando con cierta regularidad, comprobamos con satisfacción que cuidar la alimentación, evitar el tabaco y realizar ejercicio físico regularmente, no solo puede ayudar a prevenir las enfermedades cardiovasculares, sino que también nos proporciona más vigor y plenitud.
Para que los ciclistas no continuemos incrementando la lista de las víctimas de la carretera, es necesario continuar creando carriles bicicleta. Afortunadamente, en Castelló ya disponemos de una red interesante de carriles bicicleta, algunos muy transitados durante los períodos de vacaciones, señal de que muchos ciudadanos prefieren reducir el tiempo de sillón y aumentar el de actividad física.
¡Nos vemos este sábado, sin excedernos en nuestros esfuerzos!
