Está acompañado por una guía informativa para informar y concienciar a la población sobre el uso y ahorro del agua, e incorpora una alegación de Facsa
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Castellón ha aprobado el Plan de Emergencia ante situaciones de sequía. Un documento que comenzó a gestionarse en 2021, y que finalmente pasaba por el pleno para su aprobación inicial el pasado… El Plan incorpora la edición de una guía informativa con medidas para el ahorro de agua tanto para la ciudadanía en general como para las empresas. También incorpora una alegación de Facsa sobre el punto de recogida de datos.
La Junta de Gobierno ha dado luz verde al ‘Plan de emergencia ante situaciones de sequía del sistema de abastecimiento urbano del municipio de Castelló de la Plana (PEM)'.
Se trata de un documento fundamental y necesario, por el que Castellón se sitúa al frente de muchas otras capitales en su previsión de cómo actuar en casos de escasez de agua. Además este Plan también abre la puerta a la solicitud de inversiones y subvenciones por parte de la Unión Europea, para la mejora del tejido de control hídrico de Castellón.
El Plan de emergencia ante situaciones de sequía del sistema de abastecimiento urbano del municipio de Castelló de la Plana (PEM) se presentó por primera vez en julio de 2021, en una rueda de prensa de José Luís López y Fernando Navarro, tras su aprobación por la junta de Gobierno municipal.
Aquel Primer estudio analizaba los puntos de suministro de agua potable de la ciudad (12 en aquel momento) y 7 depósitos. Además, también introducía los otros puntos de obtención de agua de menor calidad, no apta para el consumo doméstico, y regenerada (procedente de la Depuradora), que puede ser reutilizada para el riego, baldeo o para la agricultura.
En principio se planteaban 4 escenarios posibles que estarían condicionados por una serie de indicadores: los valores relacionados con las lluvias y el abastecimiento natural de agua; la situación de los acuíferos, y el agua acumulada en los embalses, como puntos de referencia.
De esta forma, y según esos indicadores, el primer estadio contemplado es el de ‘situación de normalidad’.
Situación de Normalidad
En este escenario, los indicadores no muestran la existencia de escasez de agua y por tanto, no se contemplan medidas coyunturales.
Ahora bien, se deben adoptar medidas enfocadas a concienciar y educar a la población para que el uso del agua potable responda a unos principios de prevención y de responsabilidad.
Situación de Prealerta
En este escenario, se entiende que la situación no es grave para el abastecimiento, pero debe tomarse como una señal de prevención porque puede significar el anuncio de una situación futura más comprometedora.
Por ello, se proponen medidas preparatorias para retrasar o evitar escenarios más severos.
Las pautas se dirigen fundamentalmente a la concienciación y el ahorro, al tiempo que se intensifica el control y la vigilancia de los recursos y los consumos. En esta etapa, se considera conveniente la publicación y difusión de los indicadores para concienciar a la población.
Situación de Alerta
Cuando se declara la situación de alerta se reconoce que existe riesgo en la atención de las demandas hídricas. El escenario pone de manifiesto la escasez de recursos que, aunque no es grave, si resulta preocupante, sobre todo si se prolonga el periodo de sequía.
Por todo ello, el plan introduce medidas para la conservación, ahorro y movilización de recursos. Comenzarán a adoptarse medidas coyunturales para evitar que se agrave la situación. Eso puede significar, la declaración oficial de Sequía, la reducción de la presión en la red, la penalización de los consumos excesivos, o asegurar la disponibilidad de camiones cisterna para el suministro puntual de clientes sensibles si se corta el abastecimiento.
Situación de Emergencia
Se trata del peor escenario que puede llegar a producirse y pone en evidencia no solo que los recursos hídricos son escasos, sino que pueden ser inexistentes, y por tanto, requieren de medidas extremas y especiales.
En estos casos, no solo se aplicarán las restricciones que ya se hayan aplicado en escenarios anteriores, sino que además se podrán establecer medidas coyunturales y extraordinarias. Estas alternativas incluyen la posibilidad programar cortes horarios en el suministro de agua; el refuerzo de las actuaciones de vigilancia para la conservación y protección del recurso y de los ecosistemas acuáticos.
Pero también, el fomento de contratación de la cesión temporal de los derechos de agua.
Derechos temporales del uso del agua
Este punto era especialmente importante, porque permitiría a la administración poder intervenir sobre los derechos de captación de agua de usuarios particulares, o de las comunidades de regantes que tienen reconocidos derechos de extracción del agua subterránea.
Estas intervenciones solo se llevarán a cabo de forma temporal y en casos de extrema necesidad, porque se priorizará el abastecimiento de la población sobre el resto de otros intereses.
La aprobación del Plan contra la Sequía llegaba al pleno del ayuntamiento el pasado 30 de noviembre. Y contó con el respaldo unánime de la corporación municipal.
El documento fue sometido a exposición pública, para que pudieran presentarse alegaciones. Completado ese periodo, y una vez analizadas las alegaciones presentadas, el Plan ha vuelto a la Junta de Gobierno Local para su aprobación, aunque todavía deberá ser ratificado por el pleno del ayuntamiento.
Según ha explicado esta mañana el portavoz del equipo de gobierno, Vicent Sales, el nuevo documento incorpora la necesidad de “tener en cuenta que las campañas de sensibilización para el ahorro de consumo de energía deberán ser realizadas tanto a la ciudadanía en general, como al ámbito educativo y sobre todo al empresarial”.
“De esta manera, no se focaliza la responsabilidad en la ciudadanía y al ámbito doméstico en lo que respecta al uso racional de agua, más aún en caso de emergencia, sino que se hace hincapié en que todas las empresas, industria, entidades o instituciones públicas deben hacer un uso racional de este bien tan preciado”, ha resaltado Sales.
Sales ha informado también, que se ha estimado una alegación de Facsa para seleccionar como indicador para el PEM el índice general de escasez de la UTE 2 Mijares-Plana de Castellón, establecido por la Confederación Hidrográfica del Júcar porque en actualidad es el más representativo del estado del Sistema de Abastecimiento de Castelló de la Plana, en lugar del anterior indicador que figuraba, como es el piezómetro de la localidad turolense de Sarrión”.
Compromiso con la seguridad hídrica
El concejal ha remarcado que “desde el Ayuntamiento de Castellón insistimos en poner los medios necesarios para concienciar y luchar contra un tema tan sensible como es la sequía, ya que es algo de nos debe involucrar a todos. Una situación que pone en riesgo una parte fundamental de nuestro patrimonio cultural y una actividad económica muy sensible como es la agricultura. La falta de agua es una cuestión de máxima actualidad y que supone una de las preocupaciones de nuestro sector primario y los agricultores de la Plana y de toda la provincia de Castellón”.
Vicent Sales ha reiterado “el compromiso del Ayuntamiento hemos de ser capaces de garantizar la seguridad hídrica, abasteciendo con la máxima calidad y garantías a la ciudadanía. Hemos de ser más eficientes, aprovechando la digitalización para recabar cuanta más información posible de a dónde va cada gota que se consume en Castellón. Porque desde el Ayuntamiento de Castellón apostamos por un modelo de ciudad inteligente, eficiente y sostenible”.
“También tenemos la previsión de contar con nuevos y más modernos dispositivos para controlar el nivel de los principales acuíferos que abastecen de agua a Castellón o la puesta en marcha de un Plan integral de gestión del sistema de saneamiento reutilización para el riego de los parques y jardines de la ciudad o la puesta en marcha de una plataforma de gestión y control del ciclo urbano del agua en nuestra ciudad”, ha recordado Sales.
Las campañas de sensibilización comenzarán por los centros educativos, pero se extenderán también a la reutilización para el riego de parques y jardines de Castellón. “Toda la ciudadanía debemos poner de nuestra parte. Desde los pequeños gestos cotidianos en el ámbito doméstico y hasta las medidas de ahorro que implementan grandes empresas, todos debemos estar involucrados”.
Otra de las medidas que recogerá este Plan de Emergencia contra la sequía, es la elaboración de una guía para el ahorro del agua en el ámbito doméstico, también aplicada al ámbito de la empresa e industrial.
Además, Sales ha adelantado también que “las campañas de información y concienciación y no se llevarán sólo en situaciones de emergencia, sino que servirán para alertar sobre la necesidad del ahorro de agua sin esperar a llegar a la situación de prealerta para realizar esa sensibilización”.
