Rafa Cerdá Torres. Abogado.
Ya está. Ya se ha quitado la primera hoja del calendario electoral que nos espera a lo largo del año 2015. Las elecciones al Parlamento Andaluz se celebraron este domingo 22 de marzo, y casi con la práctica totalidad del escrutinio contabilizado, el nuevo mapa parlamentario de la más grande autonomía del sur español arroja los siguientes resultados: Partido Socialista Andaluz-PSOE 47 escaños, Partido Popular 33, Podemos 15, Ciudadanos 9 e Izquierda Unida 5. Un total de 109 parlamentarios, suponiendo la cifra mágica de la mayoría absoluta el umbral de 55, que se consigue con la conjunción de Ciudadanos y el Partido Socialista.
Principales novedades: el derrumbe del Partido Popular, cuya posición de primera fuerza parlamentaria con cincuenta diputados, queda transformada en una segunda posición de treinta y tres...una sangría de diecisiete escaños de diferencia, una diferencia abismal de escaños y votos que debe saltar las alarmas en la sede del Partido Popular, y por ósmosis en el Gobierno de Mariano Rajoy. No basta con vender la recuperación económica, argumento muy manido que no cala en el electorado ni de largo. También es indiscutible la fuerza con la que han irrumpido las dos fuerzas de nuevo cuño:
Podemos con quince diputados y Ciudadanos con nueve, ambos resultados son una estupenda palanca para las elecciones municipales y autonómicas que se vislumbran a la vuelta de la esquina, si bien el partido de Pablo Iglesias irrumpe con mucha fuerza, no supone una ruptura al estilo que algunas columnas periodísticas auguraban. Su empuje queda moderado por Ciudadanos, que ofrece a la Presidenta Susana Díaz una alternativa de apoyo parlamentaria de un perfil más moderado y pragmático, frente al populismo de los compañeros de Iglesias. Como contraposición al éxito de estas dos formaciones, se alza Unión, Progreso y Democracia; el partido magenta ha sufrido una verdadera debacle en número de votos. Urge y mucho, reflexionar sobre las causas del repentino vuelco que el partido magenta ha visto frente a Ciudadanos, su mensaje no llega y no vale sólo con echarle la culpa a los electores. Los dos grandes partidos (PSOE y PP) acumulan entre ambos el 62,19% de los sufragios emitidos, constituyendo todavía una expresión muy mayoritaria de la ciudadanía andaluza.
También es relevante la caída de Izquierda Unida, que ve reducida su presencia parlamentaria prácticamente a la mitad (de doce escaños pasa a cinco); Podemos le ha comido el terreno por todas partes, y quizás sus constantes bandazos en la dirección andaluza hayan pasado factura a la coalición de izquierdas, muy ambigua en lo que respecta a la persecución en torno al escándalo de corrupción conocido como los "ERES". En cuanto tocó poder de la mano del gobierno de coalición con los socialistas, su combativo discurso chocó con la obstrucción que planteó dentro del Parlamento andaluz frente a toda iniciativa para esclarecer el inmenso saqueo de los fondos públicos destinados a la formación de los trabajadores y al mantenimiento de empresas en dificultades.
La flamante Presidenta Susana Díaz ha conseguido dar la vuelta a la tortilla, el Partido Socialista de nuevo recupera la hegemonía política en Andalucía, que en la práctica ya ostentaba, dado que el Partido Popular no podía hacer efectiva su mayoría parlamentaria frente a la unión de escaños de los socialistas e Izquierda Unida. A mi juicio el adelanto electoral que se ha producido en Andalucía, obedecía más a intereses propios de Susana Díaz, que a la resolución de una situación de ingobernabilidad provocada por iniciativa de la propia Presidenta, quien bajo argumentos muy peregrinos, rompió el Pacto de Gobierno con Izquierda Unida dando paso a unas nuevas elecciones. La realidad es que todo seguirá casi igual, la oposición más diversificada pero sin que la pretendida intención de reforzar una mayoría de gobierno estable haya salido beneficiada, al contrario. Veremos de qué forma se desarrollan los acontecimientos, hoy por hoy me imagino a Susana Diaz cantando aquello tan propio de su tierra: "Olé y Olé"....
