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viernes, 26 de abril de 2024 | Última actualización: 17:43

Ojalá fuerais inmortales

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Rafa Cerdá Torres. Abogado.

Diecinueve de marzo. Jornada resaltada en el calendario como punto álgido de las fiestas Falleras y de conmemoración del Día del Padre. Amén de la onomástica sobre todas las variantes de José y Josefa, mis felicitaciones a todas las personas agraciadas con este nombre tan entrañable. A buen seguro ya habremos recibido desde cualquier resquicio publicitario, el recordatorio de obsequiar a la figura del padre con una colonia, una corbata, un libro, un ordenador personal,...todo en función de la marca comercial que nos taladre con su particular oferta.

Dejando las derivaciones comerciales del asunto, recordar la figura del padre como motivo de celebración sigue pareciéndome una estupenda idea. Una ocasión para cerciorarse del vertiginoso paso del tiempo: los que ayer éramos hijos, ahora somos padres, nuestros propios padres, preocupados por nuestras andanzas, controlan ahora que los nietos sean buen chicos,....¿no parece qué todo fue ayer mismo?.

La paternidad evoca mucho y bueno, quizás lo mejor que un hombre da de sí mismo. Ninguna experiencia se compara a la responsabilidad de cuidar de un hijo o de una hija durante sus primeros años, formar su personalidad de valores y principios sólidos a medida que el muchacho o muchacha va creciendo y al final, contemplar el transcurso de su vida como adulto. A lo largo de este camino seguro que se cometerán errores, y seguramente la vida golpeará con fuerza en ciertas ocasiones, pero con grandes cantidades de cariño, enormes dosis de paciencia y mucho valor, un padre regala a sus hijos durante toda su vida lo mejor de sí mismo.

¿Qué se puede expresar ante esa incondicionalidad? A mí me nace un inmenso GRACIAS. Celebro vuestro esfuerzo y abrazo vuestra compañía; ojalá fuerais inmortales, como bien dijo una excelente amiga. Padres, papá, por hoy y por el resto de días, gracias de nuevo por estar ahí. El mejor homenaje que existe es querer a nuestros hijos como vosotros lo hicisteis con nosotros, la vida puede ser corta pero vuestro afecto siempre permanece.