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lunes, 13 de mayo de 2024 | Última actualización: 20:59

¿Involución o evolución?

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Miguel Bataller. Ciudadano del Mundo y Jubilado.

Observando objetivamente el desarrollo de los tres principales partidos políticos del arco parlamentario español, uno aseguraría, que ninguno de ellos sabe lo que es ni a quien representa.

Y por ese camino, al que unos llamaran involución y otro evolución, pero que les separa de sus propios votantes, solo se llega al fracaso.

Acaban por asumir posturas políticas, económicas, éticas e incluso morales que les alejan de sus principios fundamentales que siempre estuvieron claros para quienes les votaban, pensando que en caladero ajeno la pesca de votos va a ser mas fructífera, y unos a otros se va arañando los votos que se desplazan del centro-izquierda en dos sentidos, ya sea al centro-derecha o a la extrema izquierda, del mismo modo que del centro-derecha se desplazaran al centro-izquierda o a la extrema derecha.

Es decir que el PSOE en ese divagar que lleva con una perdida constante de apoyo popular, fruto de su desgobierno antes, y de su pésima oposición ahora, lleva una involución hacia posiciones de izquierda radical, que queriéndolo o sin quererlo Rubalcaba va a terminar llenando el zurrón de votos de una Izquierda Unida, que asiste impertérrita y alucinada al constante aumento de su intención de voto, sin apenas mover un dedo ellos para conseguirlo.

Rubalcaba con su posición de extrema izquierda radical, y su tibieza ante el independentismo en las autonomías independentistas, les está haciendo su campaña y les va a convertir en la tercera fuerza parlamentaria en las próximas elecciones, con una presencia importante en todas las instituciones del Estado.

Naturalmente todo ellos con cargo al PSOE, ya que sus votantes decepcionados tanto por la labor de desgobierno, como de lamentable oposición, votaran a quienes siempre fueron consecuentes con su discurso radical, que es una Izquierda Unida que había languidecido, hasta tener una presencia residual en España.

El PP que había alcanzado una mayoría absoluta con unos planteamientos muy claros y un programa de gobierno que nos gustaba a todos los que le votamos, ha ido incumpliendo en todos los aspectos, menos en el macroeconómico, su propio programa, y ha sembrado el desconcierto y las dudas entre sus votantes.

Es cierto que su política frente a los partidos independentistas, es mucho mas clara y diáfana que la de los socialistas, pese a la reciente metedura de pata de Alicia Sánchez Camacho, al pedir una financiación especial para Cataluña, para ver si podía ganar algunos votos de despistados catalanes de CiU, pero se ha equivocado, porque a ella en su autonomía y con ese posicionamiento, los votos se le van a escapar hacia Ciutadans, ya que Alberto Rivera ha sido siempre muy consecuente, y ha explicado sus ideas con claridad meridiana a sus votantes.

Y en España, muchos de los decepcionados con la deriva del PP, que en este caso más que de involución es de evolución hacia posicionamientos ajenos e incomprensibles, se le van a escapar votos hacia UPyD, hacia Ciutadans si se presenta en toda España, e incluso es posible que hacia el PSOE, al desconfiar de sus palabras y sus promesas, y sólo un cambio radical en la economía española, ayudada por el entorno europeo, y una recuperación rápida, le podrían ayudar a conseguir una minoría mayoritaria, pero siempre sujeta a tener que contar con posibles aliados, que les llevarían a un desgaste innecesario, si hubiesen gobernado simplemente de acuerdo a su programa electoral.

Finalmente (y aunque este tema ya lo analicé hace unos meses) en Cataluña, el Gobierno de Mas, le lleva haciendo la próxima campaña a ERC con singular acierto, con el mismo acierto que esta hundiendo a CiU, ya que al adoptar las posturas radicales e independentistas de Esquerra Republicana, ha convencido a sus propios votantes de que para ese viaje no hacen falta las alforjas de los convergentes, y el trasvase de votos desde CiU a ERC, es un torrente tan fluido, que va a convertir en Gobernantes a los socios minoritarios y viceversa.

Es decir que los que han ‘evolucionado o involucionado’ hacia posturas que eran de otros (PP,CiU y PSOE) se van a ver profundamente perjudicados, por ese afán incomprensible de sembrar en terrenos ajenos, olvidando hacerlo en los suyos, en tanto que los que han permanecido fieles a sus principios (fundamentalmente IU, ERC y Ciutadans) van a recoger sus cosechas sin haber arado ni regado sus propios viveros de votos.

Y otros partidos que ‘pasaban por allí’, sin producir frío ni calor (UPyD) se van a beneficiar de la torpeza de quienes se han destrozado entre si, con posicionamientos absurdos y hasta es posible que en muchos sitios tengan las llaves de la Gobernabilidad, como la han tenido tantas veces IU y ERC.

Faltara ver el uso que hace de ella, ya que hasta ahora su actitud en Asturias, a mí al menos no me ha convencido.

Hasta la semana que viene.