Vicente Blay Casino Serra. Portavoz Adjunto del PP Almassora
No, no es que considere a Ximo Puig un dictador. Como no puede ser de otro modo, nada más lejos de la realidad. Pero anda uno viendo la serie documental 'Cómo se convirtieron en tiranos' en la que, recorriendo la vida de diferentes dictadores, se crea un manual del “perfecto dictador”, y resulta imposible no extraer paralelismos entre esa ficticia hoja de ruta despótica y las últimas, y lamentables, artimañas del líder del PSOE valenciano.
Y es que el primer punto de ese manual de 'perfecto' dictador es claro: “Busca un enemigo común al que echarle la culpa de todo”. ¿A qué os suena esa táctica? Sí, en el PSOE, tanto en Madrid como en la Comunitat, la han hecho suya sin pudor alguno. Solo hay un culpable de todos los males y ese es, según la izquierda española, el Partido Popular y, para más inri, el Partido Popular de Madrid.
Por eso, siguiendo al dedillo el manual, Puig no ha tenido otra ocurrencia que pedir un impuesto para Madrid. Así, poniendo el foco en una Comunidad que aporta 6.000 millones al resto de comunidades, el PSOE prefiere cargar tintas contra aquellos que bajan impuestos a sus ciudadanos en lugar de hacer lo propio.
Y no dejaría de ser solo un insulto a la inteligencia de los valencianos sino fuese porque el tipo máximo del IRPF en la Comunitat Valenciana es de lo más altos de Europa gracias a las subidas decretadas por Puig. Así que en lugar de copiar el modelo fiscal madrileño de bajadas de impuestos, el PSPV ha optado por llamarnos tontos a la cara y decirnos que sigamos pagando su incompetencia que él, mientras, tratará de empobrecer también a los madrileños.
Pero es que claro, en el PSOE parecen empeñados en aplicar los consejos de la ficción de Netflix: “Substituir la verdad objetiva por la tuya”. Y esa 'verdad' del PSOE quiere castigar a Madrid con un impuesto para substituir esa verdad objetiva y tan lesiva para todos: la del hachazo fiscal socialista que vacía el bolsillo de los ciudadanos.
No en vano, hoy los gastos de la luz, gas, y gasolina son un 29% más elevados que hace un año. Hoy, por culpa del PSOE, llenar el depósito, poner la lavadora, matricular un vehículo o, sencillamente, cortarse el pelo; se ha convertido en una actividad de lujo.
Así que mientras el PSOE viva en la ficción de la batalla contra Madrid y las rebajas fiscales, mientras todo eso suceda y la izquierda dedique su tiempo a enmascarar la verdad en lugar de trabajar para arreglarla, desde el Partido Popular seguiremos apostando por la bajada masiva de impuestos (como ya se ha hecho en Madrid y Andalucía), la libertad y la creación de oportunidades como las piedras angulares del mejor guión posible para España.
Así lo hacemos ya en Madrid y pronto lo haremos también en la Comunitat Valenciana con Carlos Mazón al frente, la provincia de Castellón de la mano de Marta Barrachina y, como reflejan las encuestas, en toda España gracias a Pablo Casado.
