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domingo, 5 de mayo de 2024 | Última actualización: 20:37

El verano desde el horizonte del distrito marítimo de Castellón, el Grau

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El Grao de Castellón está considerado como el barrio más importante de la ciudad y sus playas suelen atraer a miles de turistas durante el verano

Castellón Información / Salomé Amouroux

El Grao de Castellón está reconocido por su puerto, sus playas y sus turistas durante el verano. Castellón no sería Castellón sin su Grao. Aunque está situado a 4 kilómetros del centro de la ciudad el Grao tiene identidad propia y está considerado por toda la localidad  como el distrito lo más importante de la ciudad.

Verano en el Grao 090817 (5)De este modo, el Grao acoge, cada año a una multitud de turistas de la provincia, de España pero también extranjeros, que llegan atraídos  por la calidad de sus playas, la acogida de sus habitantes,  la calidad de de los pescados frescos cocinados dentro de los restaurantes y del alma misma del Grao.

Por otra parte, dejando a un lado a los turistas, que cada vez llegan en mayor medida, Castellón Información ha hablado con los vecinos y, fundamentalmente, los comerciantes de cómo viven el verano.  El calor es una palabra que anda en boca de la gente. Pero el Grao no le tiene miedo ni al verano ni al calor. Aunque suban las temperaturas, los graueros se sienten "orgullosos del verano" porque atrae a los turistas y permite que "nos portemos bien" explica un restaurador grauero.

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Aunque las playas se llenen de veraneantes, según una horticultora, el verano en el Grao es bastante quieto, y califican a los visitantes  como de "un turismo tranquilo, la gente se va a la playa". No obstante, la vendedora añade que "se compra más que en invierno". Efectivamente, el verano es una temporada donde las frutas y verduras son muy apreciadas más aún con el calor.

Así que, sea el invierno o el verano, los comerciantes graueros no se quejan de nada y suelen ejercitar su trabajo con una simpatía y una gentileza distintivas de los habitantes del Grao.

Y es que los graueros son 'especiales'. Acogedores, directos, simpáticos, viven y dejan vivir. Cada generación se mezcla con las otras y así, todos juntos, pequeños y mayores, aprovechan de lo que el barrio les puede ofrecer: las playas bonitas, el puerto, las fiestas locales o bien el mercado del viernes.

Se sienten felices porque tanto los habitantes del centro de la ciudad como los visitantes que llegan de fuera llenen terrazas y bares. Están convencidos de que tienen en su mano una de las mejores zonas de la ciudad, y que posiblemente, los de 'la capi' no se enteran de lo suyo es casi como un paraíso. Un núcleo urbano con las ventajas de un pueblo, y las oportunidades de una ciudad abierta al Mediterráneo, como lo fueron también sus padres y sus abuelos.

Son tierra de mar con un horizonte sin fronteras. Quizá por eso, miran de otra manera diferente el discurrir de los acontecimientos, pero ¡ojo! sin permitir que la capital de la Plana se olvide o ningunee su espacio más preciado, el frontal marítimo de la ciudad.