Ampliará 20 camas más para atender las necesidades de las personas sin hogar durante el periodo de más frío
El albergue municipal de Castelló gestionado por Cáritas Diocesana de Segorbe Castellón pondrá en marcha a partir del 1 de noviembre y hasta el 30 de abril el dispositivo de atención nocturna. El centro de acogida Mare de Déu del Lledó, ubicado en la Avinguda del Riu Sec, tiene una parte que es el albergue con comedor, duchas, lavabos y ropero y otra con un centro de día “para que los que llegan puedan realizar manualidades”, según explica el director de Cáritas Castellón, Francisco Mir.
En el albergue acogen a 39 personas cada día, aunque como destaca Mir “no siempre son las mismas porque hay una rotación continua. Son personas que llegan y pueden estar 8 o 10 días, quizá algo más, pero es una rotación continua”. Y a partir del 1 de noviembre al 30 de abril se inaugura el dispositivo de atención nocturna. Con él se incrementa la capacidad del albergue para que por las noches pueda acoger hasta 20 personas más, con un total de 59 personas para este periodo del año que hace más frío.
Mir explica que el albergue funciona “por un equipo extraordinario” en el que está el director con un equipo de técnicos y voluntarios que se encargan de las diferentes parcelas como la cocina, el comedor donde se sirven desayunos, almuerzos, comidas, meriendas y cenas que funciona muy bien. Y agrega que “esto es posible también gracias a las ayudas del Ayuntamiento de Castelló y de la Diputación y estamos convencidos de que va a continuar y que cualquier cosa que les solicitemos, van a atenderla. Nuestra labor está en que funcione perfectamente. Que, de alguna manera, las personas que lleguen allí se sientan como en su casa en la medida en la que puedan, evitar todos los roces que se puedan producir, ayudarles si preguntan dónde pueden ir o qué pueden hacer, explicarles cuales son nuestros proyectos, decirles a qué podrían dedicar su tiempo, es decir acompañarlos de alguna manera. Que cuando salgan del albergue puedan decir ‘me siento un poco mejor’, ‘tengo algo por lo que vivir’ y ese rol tenemos que mantenerlo. Y para eso las personas que trabajan en el albergue están preparadas, pero no llegamos donde queremos porque nos gustaría ampliar el albergue y no podemos por el espacio”.
En cuanto al perfil de las personas que acuden a pedir ayuda a Cáritas “no ha cambiado mucho en los últimos años”, según explica Mir, aunque “probablemente ha crecido un poco la atención a la gente de Castellón”. En definitiva, están atendiendo a un 50% de inmigrantes y un 50% de personas transeúntes, entre personas de Castellón y otras que pasan por Castellón. Son en su mayoría mujeres, monoparentales, personas inmigrantes que vienen solas hasta que puedan traer a sus parientes y familias que tienen problemas con el alquiler de sus viviendas. Pero también señala que en los últimos años ha aumentado la gente más joven.
Para Mir la inflación que se está experimentando en España se está notando mucho en la petición de ayudas y asegura que “se notará mucho más en los próximos años” porque está castigando a las familias más vulnerables “que tienen que elegir muchas veces entre la compra de comida o el alquiler o entre el ir al dentista o el alquiler”. Y señala que “estamos en una época de mucha incertidumbre porque no sabemos qué va a pasar por el tema de la guerra, de problemas energéticos que está castigando mucha a la gente”.
