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viernes, 3 de mayo de 2024 | Última actualización: 22:51

Las cifras del hundimiento

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Miguel Ángel Cerdán. Profesor de Secundaria.

La realidad es tozuda. Y no hay campaña de imagen ni dinero que la pueda ocultar. Así, los supuestos “brotes verdes” que sistemáticamente intenta vender el Gobierno tropiezan con la realidad. Y la realidad, según pronostica la propia OIT (Organización Internacional del Trabajo), es que el paro superará como mínimo hasta el 2019 el 21 %. Y el empleo que se genere será precario y a tiempo parcial, algo que es evidente dado que, según la Ley de Okun, para crearse empleo neto y digno de ese nombre el PIB de España debe crecer más del 2 % anualmente. Estas cifras adquieren  mayor dramatismo como consecuencia de que la propia OCDE ha previsto que España crezca en su Producto Interior Bruto una media del 1,7 % hasta el año 2060, con una caída nada menos que hasta el 1,4 % anual en el periodo 2030-2060.

Sin embargo, estas cifras adquieren verdadera relevancia cuando las contemplamos bajo el prisma de las proyecciones de población que ha realizado el Instituto Nacional de Estadística, el INE. Dichas proyecciones reflejan a la perfección el hundimiento, casi apocalíptico, al que se enfrenta España.

Así, según el INE, en el año 2029 uno de cada cuatro españoles tendrá más de 65 años, y en el año 2064 el 38,7 %, repito, el 38,7 % de la población de nuestro país estará dentro del grupo de los ancianos. Al mismo tiempo, las cohortes demográficas situadas entre 30 y 49 años perderán más de un millón de personas en los próximos 15 años y casi siete millones (un 45 % del total actual) en los próximos cincuenta años. Y el descenso de la natalidad provocaría que en 2029 haya un millón y medio menos de niños menores de diez años que en la actualidad y 2,3 millones menos en un periodo de cincuenta años. ¿Son o no son cifras apocalípticas? ¿Somos conscientes de la catástrofe total que se avecina? Aunque tal vez la pregunta que se deba realizar es, ¿están haciendo algo nuestras élites al respecto? Pues la respuesta, dado que las élites extractivas españolas son las más corruptas e inútiles de Occidente, me temo que es que no. Nada extraño por otra parte teniendo en cuenta que a ellos les da igual. Y es que, recordemos, el 1 % de los más ricos de España posee tanto como el 70 % de los ciudadanos y  además su fortuna ha aumentado en plena crisis. Sin embargo, podemos cambiar esta situación. Más bien debemos. Aunque sólo sea por el futuro de nuestros hijos e hijas.