Vicente Pallarés. Alcalde de Sant Joan de Moró y diputado provincial.
Ximo Puig o el caos. El desastre total. La Generalitat Valenciana del PSOE y Compromís ha dado una magnífica lección de cómo no se debe gestionar una crisis sanitaria como la que todavía estamos padeciendo. Es cierto que esta pandemia nos ha pillado a todos con el paso cambiado. Nadie esperaba que un virus pusiera a todo el planeta ‘patas arriba’… pero también es verdad que Ximo Puig y sus conselleres no han dado la talla ni cuando empezó esta pesadilla, hace ya dos años; ni tampoco ahora mismo... ¡Un desastre!
Ximo Puig ni ha hecho ni ha dejado hacer. Ante la incapacidad de defender la salud de los ciudadanos, muchos ayuntamientos – como es del caso de Sant Joan de Moró- tuvieron que asumir competencias que no le correspondían por el bien de los ciudadanos… En mi pueblo, sin ir más lejos, repartimos mascarillas, y guantes y pantallas protectoras y gel hidro-alcohólico. Y hasta hicimos pruebas masivas –y gratuitas- de antígenos. Y hasta llevamos comidas y medicamentos a aquellos vecinos que, por edad o salud, no podían salir de casa… Y no hicimos más –como era instaurar la figura de la enfermera escolar- porque la Generalitat no nos dejó…
En los peores momentos, fuimos muchos los alcaldes y concejales los que estuvimos al lado de los vecinos. En primera fila. Como uno más. Actuando como verdaderos servidores de nuestros vecinos. Y mientras, la Generalitat de Ximo Puig dictaba normas y prohibiciones sin saber muy bien por qué…
¿Qué hubiese pasado si todo este desastre sanitario y social se hubiese producido bajo un gobierno del PP? Y hablo tanto del Gobierno de España como el de la Generalitat Valenciana… Pues exactamente lo mismo que pasó cuando hace años, y siendo Mariano Rajoy presidente del Gobierno de España, los expertos –que entonces sí que hubo expertos a los que consultar- decidieron sacrificar a un perro para evitar un posible contagio masivo del ébola. La izquierda se llevó las manos a la cabeza y salió indignada a la calle protagonizando manifestaciones masivas contra el PP…
Y la prueba irrefutable de que Ximo Puig y sus conselleres no hicieron bien sus deberes es la sentencia que condena a la Generalitat Valenciana por no dotar de material de protección a los sanitarios valencianos, algo en lo que no hay precedentes. La Generalitat Valenciana no ha protegido a los que nos tienen que proteger. Y es que como dice el presidente del PP de la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, “ya no es un problema de colapso, que lo hay, es un problema de falta de capacidad de gestión y de falta de previsión por parte del Consell”. Pue eso: el caos. Un auténtico desastre.
