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viernes, 29 de marzo de 2024 | Última actualización: 21:59

Simplemente patético, señor Wert

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Miguel Ángel Cerdán. Profesor de Secundaria.

El señor Wert, Ministro de Educación del señor Rajoy, en un patético y vil símil dice que es como un toro bravo que se crece con el castigo. No sé a quien creerá que hace gracia este señor, que nos tiene acostumbrados a unas salidas de tono más propias de barra de bar  que de Titulares de un ministerio de la importancia del de Educación. Sin embargo, lo peor no son las salidas de tono de Wert, lo peor es su gestión diaria, gestión que hace de él,  el peor ministro de Educación que haya conocido España en los últimos cincuenta años, incluidos los ministros de Franco.

El señor Wert, con el apoyo de todo el Partido Popular, está desmantelando la Educación Pública de nuestro país. Y no lo digo yo; lo dicen la CEAPA, la principal Asociación de Federaciones de Padres del país, lo dicen las diversas asociaciones de alumnos, y lo dicen los representantes de los trabajadores. En este sentido, son muchas las cosas que se podrían decir de su nefasta gestión, tan pésima que motivó la primera huelga de padres de nuestra Historia, pero yo me voy a centrar en el cinismo tremendo que sobrevuela sus actuaciones y las de todo el PP. Así, por ejemplo, no está de más recordar que hace poco al partido de Mariano Rajoy y de Alberto Fabra se le llenaba la boca con que había que dotar de mayor autoridad al profesorado, con que había que prestigiar su figura.

Y bien, ¿qué han hecho? Pues en primer lugar, han aumentado las ratios, con lo que es mucho más difícil mantener la adecuada convivencia en las aulas. En segundo lugar, han sobrecargado de trabajo al profesor, sin tener presente que según diversos estudios internacionales, como los de la UNESCO, una hora de docencia directa equivale a dos horas de trabajo burocrático de otro trabajador. Y en tercer lugar, han lanzado burdas campañas de desprestigio contra el profesorado desde todos los frentes, con sus terminales mediáticas en perfecto orden de batalla. Esas son las actuaciones de los que se presentaron a las elecciones ocultando que querían desmantelar la Educación Pública, y llenándose la boca de lo que se ha demostrado grandes mentiras.

Y desde luego, creo que a estas alturas no hace falta mencionar que el PP quiere disminuir en cinco años un punto porcentual del PIB, según ha enviado a Bruselas, la inversión en Educación, como han disminuido hasta hacerlas residuales las becas, las ayudas de comedor, como al aumentar las ratios potencian de forma extraordinaria que los alumnos con problemas se queden atrás, como han disminuido los programas de compensatoria, como, en definitiva, han sacado del armario su programa oculto de potenciar la enseñanza privada en detrimento de la pública. Eso ya lo sabemos. Lo que tal vez desconozcan ellos es que tenemos memoria, dignidad y que por ello no nos vamos a resignar.

Y de la patética LOMCE, que hemos obviado aquí,  hablaremos en otra ocasión.