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jueves, 25 de abril de 2024 | Última actualización: 14:47

La dermatitis atópica es la enfermedad cutánea crónica más común y 170.000 valencianos la sufren día a día

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Según la OMS las enfermedades de la piel son la tercera causa más frecuente de enfermedad y una de las diez primeras causas de discapacidad 

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Actualmente, la dermatitis atópica es la enfermedad cutánea crónica más común en el mundo desarrollado, afectando a casi 2 millones de personas en España: entre el 15% y el 30% de los niños y entre el 2% y el 10% de los adultos españoles. En la Comunitat Valenciana, un total de 170.000 ciudadanos padecen la patología y 53.000 de estos casos son graves. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades de la piel son la tercera causa más frecuente de enfermedad y una de las diez primeras causas de discapacidad en todo el mundo.

Afortunadamente las farmacéuticas trabajan en soluciones que alivien los síntomas de esta afección. Ejemplo de ello es el de LEO Pharma, laboratorio pionero en dermatología médica que amplía su vademécum de fármacos para el tratamiento de la dermatitis atópica con el lanzamiento de tralokinumab, el único tratamiento biológico aprobado que se dirige específicamente a la citoquina IL-13, que está sobre expresada en pacientes con dermatitis atópica y que tiene una correlación directa con su gravedad.

La contribución de la Comunitat Valenciana al desarrollo del nuevo biológico ha sido clave para que los pacientes con dermatitis atópica de moderada a grave dispongan de este nuevo tratamiento, y mejoren así su calidad de vida.

El doctor Juan Francisco Silvestre Salvador, investigador principal del estudio ECZTRA 3 y que actualmente trabaja en el Hospital General Universitario de Alicante, destaca el impacto de la dermatitis atópica en los pacientes que la padecen. “Actualmente la dermatitis atópica es una enfermedad con una alta prevalencia en España y los datos nos confirman que la Comunitat Valenciana no es ajena a esta problemática. Se trata de una condición con un tremendo impacto en la calidad de vida de los pacientes que la padecen: se trata de una enfermedad con altísimos niveles de depresión, ansiedad e incluso tentativas de suicidio, y que actualmente se encuentra infradiagnosticada entre la población adulta. Con los últimos datos disponibles hemos detectado que es una patología que va en aumento y que es mucho más frecuente en áreas urbanas que en rurales. En la Comunitat Valenciana, la prevalencia es de entorno a un 3,5%, lo que supone que más de 170.000 valencianos la padecen. Se trata de una enfermedad que no mata pero que no te deja vivir”, ha remarcado el doctor Juan Francisco Silvestre Salvador.

Tres hospitales valencianos participaron en los ensayos clínicos de ámbito mundial

Para la aprobación de este biológico por parte de la Comisión Europea fueron claves los ensayos pivotales en los que participaron la sanidad española y que incluyeron a más de 1.900 pacientes adultos con dermatitis atópica de moderada a grave. La sanidad valenciana y sus profesionales sanitarios han tenido una participación muy destacada en el desarrollo de los ensayos clínicos de ámbito mundial, con la participación del Hospital Universitario La Fe, el Hospital General de Valencia y el Hospital General de Alicante.

“La Comunitat Valenciana ha tenido un peso específico y decisivo en el lanzamiento de tralokinumab, un hito muy importante para los pacientes con dermatitis atópica de moderada a grave. Las aportaciones de tres de los hospitales más importantes de esta comunidad nos permiten poner en relieve la robustez de los ensayos clínicos, ofreciendo un tratamiento seguro y eficaz a largo plazo para los pacientes”, ha explicado Marcin Kozarzewski, director médico de LEO Pharma.

La apuesta de l farmacéutica por la innovación en biodermatología supone un cambio de paradigma en el tratamiento de la dermatitis atópica. El hecho de dirigirse exclusivamente a la IL-13 es un cambio en la diana terapéutica y evidencia la eficacia y, sobre todo, la seguridad de este nuevo biológico a largo plazo, en el tratamiento de la dermatitis atópica de moderada a grave, todo ello con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes.