Castellón Información
Me parece una excelente noticia para el centro derecha español, la consolidación del liderazgo en la Comunidad Madrileña y el buen talante con el que ha sido acogido por todos los componentes del partido.
Casado, celoso de la popularidad de esta joven mujer y de su capacidad de liderazgo, intento por todos los medios retrasar el Congreso del P.P. madrileño y precisamente por eso acabó perdiendo la dirección de los populares en toda España.
Feijóo tenía bien aprendida la lección y no ha puesto ni un solo palo en las ruedas de su Partido, evitando la permanente disputa entre quienes aportan los votos y quienes pretenden administrarlos, después de conseguidos.
Otra evidente diferencia, Pablo y Alberto, es que el gallego haciendo gala de su condición de gallego, está demostrando saber manejar mucho mejor su relación con VOX.
Para el palentino, el partido verde era el responsable de la dispersión del voto de la derecha, mientras que para Feijóo es el socio imprescindible, para acabar con la insolente mayoría que nos gobierna ahora y yo la llamaría, unidos contra las libertades.
En menos de un mes, Andalucía marcará el paso a seguir presumiblemente en las elecciones generales.
Cuando ahora el C.I.S de Tezanos, ya habla de un, más que probable empate técnico, entre los bloques de izquierdas y derechas, no me cabe la menor duda de que puede haber una goleada a favor del centro-derecha andaluz.
Para no herir susceptibilidades, no entraré en más detalles, pero me atrevo a asegurar que entre el PP y VOX van a superar la mitad de los escaños necesarios para Gobernar, porque los votos de la derecha se moverán en unos vasos comunicantes indefinidos desde Ciudadanos al PP e incluso de este a VOX, pero alcanzando los objetivos entre ellos y ojalá no necesiten para nada a los “naranjitos”, ya que en ese caso uno debería de ponerse a temblar, vistos los antecedentes murcianos de algunos de sus dirigentes, que se empeñaron en autodestruirse con sus veleidades, mirando alternativamente a izquierda y derecha, para saber de dónde iban a poder sacar mejores bocados.
Craso error que marcó el principio del final de ese partido, del que apenas quedan cenizas y brasas que ya no arden.
La espectacular victoria que consagró a Isabel Díaz en Madrid, hablando alto y claro en un castellano que todos entienden por su trasparencia, debe de servirle a Moreno para comprender lo que debe de hacer.
Si a ello añadimos el indudable tirón popular que tiene la brillante Macarena Olona, a mí me quedan muy pocas dudas de que el resultado está ya cantado.
La presencia del Presidente del Gobierno, si participa de manera activa en la campaña, va a restar mucho más que sumar y por eso los mismos candidatos socialistas, no le quieren ver por allí.
Ya falta poco para abrir las urnas, que serán las que hablen por todos los andaluces.
Hasta la semana que viene amigos.
