Mantienen que el proyecto de ‘la supermanzana’ tiene graves irregularidades en la ejecución y facturación de las obras
La Asociación de vecinos de Maestría exige conocer el resultado de la segunda auditoría sobre las obras de la supermanzana. Así lo han anunciado los representantes de la Asociación vecinal, que mantienen que había indicios de irregularidades en la ejecución y facturación de las obras que se realizaron en 2018. Una primera auditoria descartó estos indicios, pero no contentó a los vecinos a los que el Ayuntamiento prometió una nueva inspección de la que no se les han facilitado datos.
EM/ Castellón Información
El proyecto estrella de la anterior Corporación para desarrollar un nuevo urbanismo integrador de barrio, conocido como la supermanzana de Maestría, sigue sin contentar a los vecinos.
El modelo desarrollado que se les prometió incluía un ‘urbanismo amable’ y accesible que redujera el tráfico, multiplicara la accesibilidad ciclopeatonal y mejorara tanto el mobiliario urbano como la calidad de vida de sus habitantes.
Este planteamiento estaba recogido también en las sugerencias del nuevo Plan General de Castellón para su aplicación en otros puntos de la ciudad.
La forma de conseguir este objetivo pasa por concebir cada barrio como una manzana o una isla, con calles sin desniveles, más cómodas para sus habitantes. Al mismo tiempo, se opta por la peatonalización o la circulación reducida, o incluso, por el cambio de direcciones con el fin de desviar el tráfico ajeno al barrio por otras grandes avenidas de comunicación.
Si además se tiene en cuenta que, al menos según los vecinos, se les prometió un cambio y mejora de las luminarias y las canalizaciones de aguas pluviales, cabe señalar que los vecinos estaban contentos cuando se les presentó el diseño.
Las obras se adjudicaron en febrero de 2017 a dos empresas (Becsa y Jujosa) con un presupuesto de 1,4 millones de euros. Pero el resultado no fue lo que esperaban los vecinos.
Protestas de los vecinos de Maestría
Las restricciones de tráfico no acabaron de encajar en lo que querían, y las luminarias no se cambiaron como ellos habían previsto. Además, al eliminar las aceras e igualar el nivel de las calles se encontraron con varios problemas añadidos: se había incrementado el peligro al que se exponían los peatones cuando los vehículos transitaban por calles estrechas; y también, cuando llueve torrencialmente los imbornales no absorben el agua que se mete dentro de portales o locales comerciales, porque toda aquella canalización desemboca en el colector de la Ronda Mijares, que satura también su caudal.
Por otra parte, también hubo un modificado en las obras. Las obras costaron más de lo previsto y, aunque fue aprobado por el Ayuntamiento, hubo grupos municipales, concretamente los de PP, Ciudadanos y Castelló en Moviment que denunciaron la imprevisión municipal y la ejecución de las obras.
La manzana envenenada llegó al pleno
Y así, la ‘superilla’ o ‘supermanzana se convirtió en una manzana más que envenenada’, sobre todo, cuando en el pleno del 26 de febrero de 2018 se solicitó una auditoría externa que investigara las obras que se habían realizado. Aquella moción fue aprobada con los votos del PP, Ciudadanos y Castelló en Moviment. También en la pasada legislatura el Gobierno (PSOE + Compromís) estaba en minoría y CseM fiscalizaba a favor o en contra de sus socios del Grao.
Primera Auditoría de Maestría
La auditoria, realizada por una empresa externa, consideró que lo realizado era correcto en la medida que se había proyectado.
Y los vecinos no lo aceptaron. En consecuencia, solicitaron una segunda auditoria.
Según alegan ahora los vecinos de Maestría, el resultado de aquella segunda auditoría sobre los problemas que comunicaron al concejal de Urbanismo el 25 de febrero de 2019, no les ha sido facilitado y exigen conocerlo.
Documento aportado por los vecinos
Concretamente, los vecinos señalan en un comunicado:
“El pasado 25 de febrero, la Asociación puso en conocimiento del concejal responsable, Rafael Simó, sólidos indicios que señalaban graves irregularidades en la ejecución y facturación de las obras: presuntamente varias partidas valoradas en al menos 150.000 € no fueron ejecutadas pero si facturadas.
El concejal expresó que compartía nuestro planteamiento y afirmó que tomaría cartas en el asunto inmediatamente. Desde la asociación transmitimos a nuestros socios estos hechos y la buena voluntad por parte del Ayuntamiento.
Días más tarde esta información también fue facilitada a los medios de forma detallada, con datos y documentos: Indicios apuntan a que hay 150.000 € sin justificar entre el presupuesto y la ejecución real de las obras de la supermanzana.
Segunda auditoría
Tras estos hechos, en marzo de 2019, el Ayuntamiento anunció que se llevaría a cabo una segunda auditoría para aclarar estos hechos y determinar si efectivamente había pagado por obras no realizadas:
La concejalía transmitió que la Asociación (y por extensión los vecinos) sería parte activa de la misma ya que conocía de primera mano el desarrollo de la obra. Así mismo el concejal, durante una visita al barrio, se comprometió a dar solución a algunas de nuestras reivindicaciones.
Desde la asociación queremos señalar que la realización de una segunda auditoría es algo totalmente inusual. Es improbable que un ayuntamiento lleve a cabo algo así si no tiene argumentos de peso.
Sin noticias
Después de más de 9 meses seguimos esperando. No hay resultados, no hay inspecciones de relevancia en el barrio, no se ha consultado ni informado a la Asociación. A pesar de todo ello la Asociación intentó, reiteradamente, reunirse con el concejal hace unos meses pero no tuvo éxito.
Pedimos al Ayuntamiento que dé un paso frente y que realice, como se comprometió, una auditoría en profundidad junto con el vecindario, desgranando cada partida. Que se hagan públicos los datos y resultados y que, si corresponde, se depuren responsabilidades.
También reclamamos que asuman los compromisos que el concejal adquirió con la Asociación y se solucionen los problemas de seguridad vial existentes en la supermanzana como la inseguridad del peatón, objetivo principal de la reforma".
