El Ayuntamiento pone en marcha el primero de los itinerarios culturales con el que pretende salvaguardar el reflejo de la memoria
EM /Castellón Información
La historia de las ciudades queda impresa en sus calles, se puede consultar en los libros, contrastar con los manuales y transmitir vía oral a través de profesores y sabios…
Pero esa historia también tiene su reflejo dibujado, como si fuera el anverso de un espejo, a través de su cultura funeraria… y en eso, el Cementerio de San José de Castellón… es todo un compendio de lo que la vida de Castellón.
Los muertos también hablan y, a través de ellos, la cultura de su tiempo, sus monumentos, su arquitecturas y sus epitafios.
El Ayuntamiento de Castellón impulsará una serie de itinerarios culturales en el cementerio de San José que contribuyan a proteger y divulgar el patrimonio cultural que en él reside.
La actividad se ha presentado hoy en una rueda de prensa, en la que han participado Verónica Ruiz, concejal de Cultura, Rafa Simó, concejal de cementerios, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, y el gerente de la empresa mixta Nuevo Cementerio de Castellón, Antonio Porcar.
Estas singulares rutas culturales ya están operativas en cementerios de ciudades españolas como Barcelona, Granada, Bilbao o Madrid.
Castellón se suma a esta iniciativa con un primer itinerario denominado ‘Un recorrido por la memoria’ que recorre las tumbas de personajes representativos de la sociedad castellonense que en diferentes épocas contribuyeron de diversa forma en la identidad de la ciudad.
El cementerio de San José de Castellón se inauguró en 1862, con el entierro de un pobre ilustre, como marcaba la tradición. Era entonces el cementerio nuevo, más grande, más espacioso, más rico, y… fuera de la ciudad, al otro lado del río Seco. El ‘garroferal del Mut’ se transformó en camposanto, con un área sagrada y otra civil… diferenciada de la anterior.
Un lugar donde sus protagonistas llegaban ‘de esqueneta’ cuando no había riadas que cortaran el paso de aquel cauce sin puente…
Donde el dinero también tenía su curso… y la ideología pagaba tributo. Donde las víctimas de la guerra Civil de uno y otro lado también tardaron tiempo en encontrar justicia… y donde las diferencias se pagaron caras, en tierra ‘de nadie’ a la sombra de la intolerancia.
Con una estructura de cuadros, que luego se amplió una y otra vez por uno y otro lado… hasta agotar cualquier posibilidad de ampliación.
El primer recorrido cultural está dedicado ciudadanos ilustres que en el transcurso de su vida contribuyeron en el desarrollo de la historia de Castellón. Políticos, intelectuales, artistas, empresarios, hitos de la historia castellonense cuya labor, en muchos casos, ha sido reconocida por las sucesivas corporaciones municipales concediéndoles la categoría de hijos Predilectos y Adoptivos de la ciudad de Castellón.
La concejala de Cultura, Verònica Ruiz, ha señalado que este Recorrido por la Memoria, que se estrena coincidiendo con la celebración de Todos los Santos, incluye un itinerario por las tumbas de nueve hijos predilectos y tres adoptivos. Matilde Salvador (2003, compositora y pintora); Miquel Peris Segarra (1984, poeta); Bernat Artola Tomás (1983, poeta); Fernando Herrero Tejedor (1963, político); Leandro Alloza Agut (1882, ingeniero); Juan Bautista Porcar Ripollés (1952, pintor); Juan Bautista Adsuara Ramos (1950, escultor); Vicente Ruiz Vila (1882, abogado y político) y Fernando Gasset Lacasaña (1920, abogado y político).
En cuanto a los hijos adoptivos, el recorrido incluye la visita a las tumbas de José Clará Piñol (1922, médico cirujano); Luis Revest Corzo (1963, historiador y cronista de la ciudad) y Casimir Meliá Tena (1986, ingeniero y escritor). Ente paréntesis aparecen los años en que fueron declarados hijos predilectos o adoptivos.
Ruiz también se ha referido a otra actuación ejecutada en el cuadro civil del cementerio para dignificar esta zona del cementerio de San José. Es el área de la integración, que suprimió aquellas diferencias impuestas por mentalidad, diferencia o ideología. Para ello se han instalado 10 placas de hierro tratado que recogen cerca de 1.000 nombres de represaliados por el franquismo, “una actuación que se ha hecho gracias a la colaboración del Grup per a la Recerca de la Memòria Històrica”.
Por su parte, la alcaldesa de Castellón ha destacado que “los itinerarios culturales en los cementerios propician la protección y divulgación del patrimonio que allí se encuentra. Por su parte, el gerente de la empresa mixta, Antonio Porcar, ha subrayado que los cementerios pueden considerarse como “museos a cielo abierto” que permiten contar de una manera original y novedosa la historia de los pueblos y ciudades, a través de las personas que allí se encuentran enterradas y que al fin y al cabo son las que escriben la historia.
Porcar ha explicado que a partir de mañana quienes visiten el cementerio de San José podrán obtener un folleto que contiene la relación de los personajes ilustres, sus fichas explicando quién fue cada uno y de qué manera contribuyó en la sociedad castellonense junto con un plano donde encontrar su ubicación dentro del cementerio. “Cada tumba de cada personaje se ha señalizado con una placa conmemorativa grabada donde se especifica si es hijo predilecto o adoptivo de la ciudad. Lógicamente Hijos predilectos y adoptivos hay muchos más, pero estos son los que tenemos enterrados en nuestro cementerio”, ha explicado.
Este itinerario cultural permitirá, además, descubrir a través de las placas conmemorativas ciertas curiosidades que quizás se desconocen como, por ejemplo, que Bernat Artola fue un intelectual de su época muy implicado en la vida social de Castellón y al que le debemos el “establecimiento de las Fiestas de la Magdalena”. O Leandro Alloza junto quien junto a Ruiz Vila iniciaron el proyecto de construcción del actual puerto de Castellón. O Matilde Salvador, cuya ópera “Vinatea” fue la primera estrenada por una mujer en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona en 1974.
