Miguel Bataller. Jubilado
Cuando ayer, día 3 de Diciembre de 2019 me senté a ver la televisión a primera hora de la mañana y tras los trámites reglamentarios para conformar las Mesas de Edad del Congreso y del Senado y las posteriores conformaciones de Presidencias y estructuras jerárquicas de las dos Cámaras, escuché a la Sra. Batet y a la Sra. Llop leer con absoluta claridad, que únicamente serían aceptables el juramento o la promesa de respetar la Constitución y las Leyes españolas, me sentí aliviado porque siempre me pareció de un mal gusto rayando la ilegalidad lo del “imperativo legal” que venía siendo habitual, entre aquellos cuyo único objetivo parecía ser cobrar unos sueldos suculentos sin el menos compromiso con sus conciudadanos ni con la Patria que representan.
Craso error.
De nada sirvió la advertencia, porque no sólo se incidió por algunos en repetir lo del “imperativo legal”, sino que aparecieron mil y una nuevas formas de ridiculizar a las dos Cámaras representativas de nuestra Democracia.
Unos prometieron o juraron “por el 1º de Octubre”, otros lo hicieron por los “Presos Políticos”, otros por su “Patria Vasca” y seguramente se me escaparían otros juramentos o promesas por “Yuppy” o por “Piolin”, porque ya nada me hubiera sorprendido.
Convirtieron nuestras Cortes Generales en “el coño de la Bernarda” como dirían los clásicos.
Se hubiera podido evitar si al primero que incumplió la formula reglamentada, se le hubiese expulsado negándole el derecho a representar a nadie por “necio, incompetente o malintencionado”, pero tanto la Presidenta del Congreso como la del Senado habían sido puestas a dedo por la voluntad expresa de un Presidente del Gobierno en funciones y por lo visto llegaron bien aleccionadas, para “amagar….pero no golpear” ya que su benefactor, no podía permitirse indisponer a los enemigos de la España Constitucional, porque si lo hacía tanto los independentistas, como ex terroristas etarras y los republicanos comunistas iban a negarle el apoyo, bien fuera en forma de voto a favor o de abstenciones en segunda vuelta.
Pedro Sánchez no podía renunciar de ninguna de las maneras a su sueño de convertirse en Presidente del Gobierno como mínimo o incluso en el Primer Presidente de la Tercera República Española si llegaba el caso.
Todas sus actitudes y decisiones recientes parecen destinadas a uno de estos dos objetivos personales o quizás a los dos….uno tras otro.
Me sentí avergonzado de ser español.
No se puede vilipendiar al pueblo español como se hizo el martes pasado, delante de las cámaras de todas las televisiones del mundo, sin que aquí nadie mueva un dedo, ni pase nada para recuperar la dignidad y el honor de ser españoles y de defender nuestras Leyes y nuestra Constitución contra quienes parecen empeñados en destruir España en mil pedazos.
No es posible que las Presidentas de las dos Cámaras, se encogieran de hombros, después de haber puntualizado que sólo se admitirían las respuestas escuetas de “Juro” o “Prometo” sin tener previsto lo que deberían de hacer ante el primer desacato a la fórmula prevista.
Ahora queda en manos de Su Majestad Felipe VI la potestad de determinar a qué candidato entre los posibles presenta con los apoyos necesarios y convenientes para la estabilidad institucional y constitucional del Estado Español.
Tiene ante sí un problema de muy difícil solución, pero como “doctores tiene la Iglesia”, no seré yo quien le diga o sugiera lo que tiene que hacer.
En sus manos y su sentido común encomiendo a España, porque lo que yo no haría nunca es encomendarla en manos de quien no le importaría acabar con ella y con sus sistema constitucional vigente, para ocupar un lugar que ni le corresponde, ni se lo ha ganado, ni se lo ganara nunca con el apoyo de quienes aman y protegen a España.
Buena suerte Majestad y espero no tener que comprarme un billete para exiliarme de mi Patria y mis raíces.
Hasta la semana que viene amigos.
