La junta general de accionistas celebrada por el Castellón ha acordado solicitar la entrada del club en concurso de acreedores para tratar de resolver los problemas económicos que padece la entidad por la gestión llevada a cabo por los anteriores gestores del club, la sociedad Castellnou 2005.
El conjunto castellonense que preside David Cruz presenta una deuda acumulada real que supera los cinco millones de euros.
Los dirigentes del club de La Plana consideran el concurso de acreedores una herramienta beneficiosa para acordar un plan de pago con los proveedores dada la importante deuda que arrastra. El Castellón debe más de 5 millones de euros, según ha anunciado el presidente, David Cruz, fruto de la gestión realizada por los anteriores rectores, especialmente, Castellnou 2005 bajo la presidencia de José Laparra y de Antonio Blasco como consejero delegado, junto al representante de futbolistas, José Manuel García Osuna, a su vez accionista mayoritario.
Este concurso de acreedores no sería suficiente para resolver la situación del Castellón si no va acompañado de buenos resultados deportivos, lo que lleva a que Cruz se marque la meta de ascender al equipo de Tercera a Segunda B la próxima temporada y tratar de hacerlo militar en superiores categorías. Durante cerca de cinco horas, Cruz y su junta directiva han respondido a gran parte de las cuestiones realizadas por los accionistas -en momentos con fuerte tensión-, aunque dado su poder accionarial han aprobado por mayoría todos los puntos de la orden del día.
Previamente, se ha dado lectura al requerimiento notarial remitido por Antonio Blasco en el que anunciaba la impugnación de la junta celebrada este sábado, así como la anterior de agosto de 2012 en la que accedió el nuevo consejo de administración.
Los rectores consideran la petición de Blasco fuera de lugar y le remiten al juzgado, aunque el propio Blasco ya ha anunciado que en caso de no atenderse su petición, como así ha sido, presentará una demanda en el juzgado
